La visita a Edimburgo es imprescindible para quienes se acerquen a Escocia. Se trata de un recorrido que merece al menos dos días para aprovechar cada maravilloso rincón que ofrece la capital y segunda ciudad más grande después de Glaslow. Edimburgo, se encuentra ubicada en la costa este, a orillas del fiordo del río Forth.

Los alojamientos más recomendados para los turistas son el Royal Mile muy cercano a la zona céntrica y el Princess Street, ambos con una ubicación estratégica para el desarrollo de las actividades de los visitantes y de precios muy accesibles.

La ubicación de ambos permite al turista recorres de manera tranquila y sin temor a perder las calles de la maravillosa ciudad, sin tener la necesidad de recurrir al transporte público. Puesto que un radio de algo más de un kilómetro, puede disfrutar del encuentro con el gran Castillo de Edimburgo, de los museos como Royal Scottish Academy o National Gallery of Scotland; las inmensas catedrales de St Giles, prodigiosos monumentos a Scott y Calton Hill que ofrecen escenarios preciosos sobre la ciudad y también el palacio de Hollyrood Palace, que concierne a la residencia de la corona británica en Escocia; todos lugares imperdibles para los excursionistas que eligen la bella Edimburgo.

Por otro lado, para quienes busquen un momento de tranquilidad y contacto con la naturaleza, se pueden acerca a la colina Andrew´s Seat, con orígenes volcánicos que además ofrecen una imperdible vista panorámica de la capital de Escocia.

Imagen: Ruta Nómada