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Hace un par de semanas finalizó uno de los torneos más importantes que tiene el tenis a nivel mundial, y de seguro, el más añejo de todos ellos y el que posee más tradición. Estamos hablando, desde luego, del Abierto de Wimbledon, uno de los cuatro Grand Slam de la temporda, y que fue obtenido por el escocés Andy Murray.

Justamente, sin embargo, la prensa presentó el triunfo de Murray -él tampoco se negó, está claro- como el primero de un británico en 77 años, tras vencer al serbio Novak Djokovic. Sin embargo, eso causó la furia de millones de escoceses, que están seguros que de no haber sido campeón, Murray no sería británico, sino despectivamente “escocés”.

En este sentido, el ministro principal de Escocia, el nacionalista Alex Salmond, tuvo un detalle que pasó desapercibido al comienzo pero que luego llamó la atención de todos los presentes, cuando tomó de la cartera de su esposa una gran bandera de Escocia, y comenzó a flamearla frente al rostro incrédulo del premier británico, David Cameron.

Ahora, de cara al referendo sobre la independencia de Escocia se celebrará el 18 de septiembre de 2014, no son pocos los escoceses que se han sentido ofendidos -una vez más- por el trato de la prenda británica a uno de sus compatriotas, y por muy insignificante que parezca el hecho, es otro de los que inclinaría la balanza en favor de un “sí”.

Vía: La Tercera
Imagen: Musslimhype
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