Una de las maravillas de Escocia son sus grandes jardines botánicos, desperdigados por todo el país. Cada día recogen a cientos de turistas o pobladores que se acercan a conocer el lugar y estar en contacto con la naturaleza.

En este caso, te mostraremos el jardín “Princes Street” que se encuentra ubicado en Edimburgo, debajo del Castillo que está ubicado en el centro de la ciudad. Es un sitio público que posee más de 150 mil metros cuadrados y fue inaugurado en 1820.

Además de ser un espectáculo natural, sirve como límite y división entre la Ciudad Vieja y la Nueva mediante The Mound, una colina muy interesante para dar un paseo en alguna tarde libre durante tu estadía.

Antes de transformarse en uno de los mejores jardines botánicos del país, el Princes Street Garden, era un sitio donde pasaba el Lago Norte pero debido a la gran contaminación de las aguas decidieron drenarlo y construir encima de ellas este gran atractivo turístico.
Donde hoy se ubica el Princes Street Garden antiguamente pasaba el Lago Norte, el más importante de todo Edimburgo en el cual se vertían aguas residuales como así también se utilizaba para el abastecimiento de agua potable. Debido a su contaminación, el lago fue drenado y allí fue posible construir los jardines que hoy son el centro de atención de visitantes y locales.

Para llegar a este destino, puedes dirigirte a través de un bus o a pie, esta última opción es la recomendada para poder apreciar de mejor manera el resto de los paisajes.

Los lugares más recurrentes a la hora de conocer el jardín botánico son: la fuente Ross, instalada en el lugar durante el año 1872 y durante la navidad, la Winter Wonderland.

Vía: 101 Viajes
Imagen: Turismo en Fotos