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El dirigente nacionalista escocés, Alex Salmond, ha querido salir al cruce de las declaraciones de muchos de los principales políticos ingleses, además de la propia Reina Isabel II, al señalar a la prensa de que está totalmente convencido de que su país seguirá manteniendo una prosperidad en caso de independizarse el año que viene.

“Escocia tiene mucho éxito en materia de inversiones. Lo que estamos descubriendo es que el renombre internacional de Escocia es una ventaja. La gente piensan en Escocia y en ciertas inversiones por primera vez”, explicó el funcionario más asociado al Referéndum del próximo año que decidirá a través del voto popular la independencia o no del país.

Como siempre sucede en estos casos, no obstante, distintas voces se alzaron desde Londres para señalar que a Escocia le sería sumamente difícil poder mantenerse económicamente en caso de separar sus asuntos del Reino Unido, sobre todo porque al comienzo deberá adaptarse al euro, debiendo dejar de compartir la libra esterlina.

De este modo, Salmond quiso dejar sin efecto las previsiones más pesimistas de sus adversarios que auguran un futuro económico sombrío de esta provincia británica semi-autonómica, aunque también es cierto que incluso algunos escoceses que se muestran a favor de la independencia, tienen sus dudas en este aspecto.

Vía: Swiss Info
Imagen: Telegraph

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